Sus brotes dorados nos da una taza de color cobre y un picante sabor a malta fuerte, combinado con el carácter típicamente suave y terroso de los tés de Yunnan.
Yunnan en el suroeste de China es donde nace este té. Se cosecha sólo entre finales de marzo y mediados de abril, dependiendo del clima y se elabora de acuerdo a un método especial. Este té se cultiva en altitudes que oscilan entre los 1.800 y 2.100 m, en una zona con un clima fresco y bosques naturales. Sus brotes dorados nos da una taza de color cobre y un picante sabor a malta fuerte, combinado con el carácter típicamente suave y terroso de los tés de Yunnan.