Rooibos verde de cultivo biológico. De sabor mucho más herbal que su hermano fermentado. Rooibos BIO
No, el rooibos no tiene teína porque el rooibos no es un té
El rooibos no es un té, ni raíces, ni cortezas ni nada raro. Tan solo es un arbusto... rojo.
Rooibos = infusión o tisana. Té = infusión de hojas de té
Aspalathus linearis (Rooibos) vs Camellia sinensis (té)
No, el rooibos no tiene teína porque el rooibos no es un té, aunque hay quien se empeña en llamarlo “té rooibos”.
Os preguntaréis entonces qué es esta deliciosa bebida que con tanta felicidad degustamos en cualquier momento (incluso antes de dormir ahora que sabemos que no afecta a nuestro sueño).
El rooibos, como digo, no es un variedad desteinada del té, como muchos vendedores de “rooibos” y “té” en bolsitas pretender dar a entender, el rooibos, por tanto, no sale de nuestra querida Camelia Sinensis, ni mucho menos. El rooibos es un arbusto (Aspalathus linearis) originario de Sudáfrica, de hecho, de ahí es de donde toma su nombre, rot, es rojo en afrikáner y bush, arbusto. El rooibos se comenzó a consumir en el S. XVII (anteayer si lo comparamos con el tiempo que se lleva consumiendo té).
En el caso del rooibos, lo que infusionamos son las hojas de este arbusto.
Siendo originariamente verdes pasan por un proceso de secado bajo el sol, al que por afinidad con el té se le llama oxidación, hasta que llegan a tener ese color rojizo y el sabor que les caracteriza. Además, para no quedarse a la zaga de su veterano hermano mayor, el rooibos también se puede tomar verde (sin oxidar), el rooibos verde, teniendo un sabor más herbal y suave que el original, no deja de ser exquisito y además permite combinaciones deliciosas como el rooibos verde con hierbabuena o de Limón y vainilla.
El hecho de que el consumo de rooibos se haya extendido tanto en los últimos años responde a múltiples razones: por un lado, porque sí, es delicioso, tanto solo como en cualquiera de sus mezclas, su sabor ligera y naturalmente dulce hace que combine con un gran variedad de ingredientes: piña y limón, cabello de ángel, arándanos, frutos rojos, etc. incluso, los amantísimos del té negro Pakistaní u Orange Cookies pueden encontrar su mezcla hecha con Rooibos!
Por otro, al no ser té, no tiene teína, ni cafeína ni nada acabado en “ina” y que pueda alterar nuestra paz interior y por tanto se puede tomar a cualquier hora del día y lo pueden tomar personas de cualquier edad (de 0 a 99 años).
Además, porque, como no, son muchas las bondades que dicen que tiene esta infusión (si no es paja empaquetada como rooibos, claro). Desde la Colonial de Ultramar, como siempre, con que sea delicioso y sano, nos basta, pero no se puede negar que no son pocos los estudios que hablan de las grandes propiedades antioxidantes del rooibos. Además, su alto contenido en polifenoles que tienen cualidades antiinflamatorias. Se señala también su capacidad para evitar la retención de líquidos, al ser diurético y su uso para bajar la tensión, combatir problemas intestinales o tratar los cólicos infantiles.
Nada más puedo añadir, ya solo queda que probéis y comprobéis que es cierto todo lo que digo, en la Colonial de Ultramar podéis encontrar 23 variedades donde utilizamos una base de Rooibos original con certificado de cultivo biológico mezclado con todo tipo de ingredientes naturales y combinaciones deliciosas desde los más afrutados, como el Rooibos Arándanos o el Rooibos de Frutos del Bosque, pasando por los especiados como el Oriental o el Orange Cookies o con un toque dulzón (y sin calorías) como el de Toffee o el de Chocolate Inca, ¡rooibos de todos los gustos, para beber en cualquier momento!
Ah, por cierto, se pronuncia “roíbos”, ¿fácil, no?, no tenéis excusa para no pedirlo la próxima vez que vengáis por La Colonial de Ultramar.
.